Redacción/El Nacional

Luego de estar ausente una semana en su programa de televisión, Jimmy Kimmel regresó con su hijo en brazos e imploró al Congreso de Estados Unidos que restituya y mejore la cobertura de salud de los niños.

El conductor habló entre lágrimas acerca de la causa por la que ha abogado desde que nació su bebé Billy, quien padece un defecto cardíaco, por lo que necesitó una operación de corazón poco después de nacer.

La semana pasada Billy fue sometido a una segunda operación, la cual fue todo un éxito, por lo que Kimmel pidió que se restaure el Programa de Seguro Médico para Niños (Children’s Health Insurance Program) que quedó sin financiamiento y en un punto muerto político desde el mes de septiembre.

Asimismo, mencionó que es repugnante que el Congreso esté poniendo los recortes fiscales para millonarios por encima de las vidas de los pequeños.

Dicho programa ampara a 1 de cada 8 niños cuyos padres ganan más de lo permitido para calificar para Medicaid, pero que no tienen cobertura a través de sus trabajos.

“Este pequeño fue operado del corazón, pero ya se encuentra bien […] Papá llora en televisión, pero Billy no, es increíble. Queremos agradecer a todos los talentosos doctores y enfermeras que atendieron a Billy con tanto cariño y compasión, al igual que lo hacen con tantos niños de todos los niveles de ingreso, cuya salud ahora se ve amenazada por algo que quizá ustedes no han escuchado. Se llama CHIP […] Imagínense la angustia de no saber cómo se costeará el tratamiento necesario para salvar la vida de un hijo […] Ningún padre debe tener que decidir si puede costear el salvar la vida de su hijo”, expresó el conductor.