Redacción/El Nacional

El tribunal de Costa Rica condenó a 12 años de cárcel al jefe de nefrología del Hospital Calderón Guardipor el delito de trata de personas con fines de extracción ilícita de órganos, como cabecillas locales de una red con nexos en Israel y Europa del Este que ha reclutado a 14 personas para el contrabando internacional de riñones.

Fueron declarados culpables al nefrólogo Francisco José Mora Palma y al comerciante Dimosthenis Katisgiannis Kerkazi.

Se le acusó a Mora también de peculado y se ordeno que ambos permanezcan por ocho meses, mientras se tomaba una decisión. Han sido solicitados por la Fiscalía 751 años de prisión para los cinco involucrados.

El país de Costa Rica fue usado como anfitrión del turismo medico para ocultar el tráfico ilícito de órganos controlado por nexos financieros en Israel. Se justifico que aunque hubo 14 víctimas del negocio fue el único delito.  Los riñones eran vendidos a extranjeros esencialmente israelíes con insuficiencia renal.