El Tribunal de Casación egipcio confirmó de manera definitiva la cadena perpetua para el expresidente de Egipto, Mohamed Mursi, por un caso de espionaje relacionado con Qatar.
La corte confirmó la cadena perpetua, que equivale en Egipto a 25 años, al depuesto mandatario islamista de los Hermanos Musulmanes acusado de hacerse con documentos relacionados con la seguridad del Estado y entregárselos a las autoridades de Qatar.
Además, ratificaron la pena de muerte a tres miembros de la cofradía acusados y a otros dos de la hermandad a cadena perpetua y trabajos forzosos por el mismo caso.
El 22 octubre de 2016, la corte citada confirmó también la pena de 20 años de cárcel contra Mursi por el uso de la violencia y por la muerte de manifestantes durante los disturbios de diciembre de 2012 a las puertas del palacio presidencial de Itihadiya, en la capital egipcia, durante las primeras grandes protestas contra el islamista.
Desde el 25 de junio, Egipto -junto a Arabia Saudita, Bahrein y Emiratos Árabes Unidos- ha cortado la relación diplomática con Qatar, al que le acusan de apoyar el “terrorismo”.