Redacción/ El Nacional


Al menos siete horas fueron las que un paciente tuvo que esperar para poder ser intervenido de urgencia por obstrucción intestinal, debido a que el cirujano asignado aseguró que “no tenía tiempo para atenderlos, pues había acabado su turno”.

Los hechos se registraron en la Clínica del IMSS en la ciudad de México, donde el afectado identificado como Miguel Vázquez de 79 años, fue notificado que tenía que ser operado en calidad de urgencia.

Según informes Vázquez Fuentes, tenía programada la crujía para las 19:00 horas del martes, sin embargo tuvo que ser regresado a piso ya que el doctor encargado de la cirugía argumentó que a él ya no le daba tiempo de operar, puesto a que su turno había concluido.

Ante esta situación familiares, del paciente acudieron a reclamar al subdirector de la dependencia, logrando así que Vázquez fuera enviado al quirófano nuevamente, casi siete horas después de lo esperado.

Se desconoce si la espera causó algún problema en la salud del paciente ya que hasta el momento el Instituto Mexicano del Seguro Social no ha emitido un comunicado en relación a este hecho.