Hasta el momento se registran 16 personas muertas, centenares de heridos y graves destrozos en el sureste de China, a causa el tifón, considerado ya el más dañino de la temporada.
Las regiones costeras del sur de china se vieron afectadas, durante la jornada del miércoles con fuertes vientos y olas que solo en la región Administrativa Especial de Macao acabaron con la vida de ocho personas.
Según reportes otras 150 personas resultaron heridas en la ciudad, que se quedó sin suministro eléctrico durante casi 24 horas, la cual hasta el momento permanece sin energía para la mitad de los ciudadanos, ya que la Oficina de Información del Gobierno dio a conocer que esta sería restaurada gradualmente.
Por otra parte el jefe ejecutivo de la Ciudad, Fernando Chui-on, declaró que “Hato” fue el tifón más fuerte registrado en Macao en 53 años y que ha tenido un impacto grave en toda la región.
En el resto de China, el tifón alcanzó tierra firme en la ciudad de Zhuhai (Cantón), donde se registraron vientos de hasta 162 kilómetros por hora y al menos cuatro personas perdieron la vida.
En Hong Kong, el observatorio meteorológico emitió su alerta máxima en el sistema de tormentas, lo que no ocurría desde hace cinco años y al menos 121 personas resultaron heridas.
Mientras tanto, en la ciudad de Zhongshan alrededor de tres personas perdieron la vida, entre ellas una mujer que se trasladaba en una motocicleta y murió después de ser golpeada por un árbol caído, otro hombre falleció por el impacto de una camioneta arrastrada por el viento y el tercero se desconocen las causas.
En toda la provincia de Cantón unas 27.000 personas fueron evacuadas y cerca de dos millones de hogares y negocios sufrieron el corte del suministro eléctrico debido a los daños en la red.
Por esta razón la llegada del tifón había sido recibida con importantes precauciones, como el cierre de escuelas y muchos centros de trabajo en el sur de China, una de las zonas más pobladas y de mayor importancia industrial del país.