Escrito por Edgar Martínez

La derrota contundente frente al cuadro de Alemania en el partido de semifinales de la Copa Confederaciones de Rusia, nos ha dejado dos enseñanzas muy claras, de las cuales creo yo que todos sabemos: La primera, las rotaciones deben parar y la segunda, nuestro futbol no le llega, ni le llegará por al menos en estos años al futbol ya no alemán, sino europeo en general.

Las críticas iban a llegar de cualquier forma, ganara o perdiera, México sería criticado duramente, pues si les ganaban a los teutones, señalarían que el Tri salió victorioso ante una “Alemania B”, que dicho sea de paso, no son los titulares indiscutibles de este combinado germano.

Pero como se perdió, los especialistas en la materia – sobre todo los que quieren que Osorio no dirija más al combinado tricolor – salieron a la luz. En algunos puntos tienen razón, “nos ganó Alemania B”, sí, nos dejó en la orilla una selección que pese al nombre no tenía a sus jugadores “estrella” pero que si cuenta con mucha calidad.

Talento joven que se le ha estado dando oportunidad en diferentes equipos, sino Julian Draxler ya es figura con el PSG, cuando nuestro “estandarte” en lo futbolístico se encuentra en el Bayer Leverkusen ¿Vaya diferencia no?

Alemania solamente nos dejó ver que México aún no se encuentra listo para encarar este tipo de partidos, pese a que la mentalidad está al 100, el físico tal vez no. El sueño se cayó frente al plantel “B”, pero que dentro de unos años, sino es que meses, se convertirán en el nuevo peligro de las selecciones a nivel mundial.

Lo que molesta un poco – y hablo personalmente – es que crean que por tener en su plantilla de jugadores que juegan, en su mayoría en Europa, se le pueda competir al tú por tú a combinados de mayor calidad. No se puede pensar así, y menos cuando tu creativo, el mejor jugador, está en la banca (Carlos Vela).

La realidad es que, si se creían superiores y que ahora sí darían ese siguiente paso, Alemania “B” nos dijo – “quítense que aún no lo están”. Lo triste es que estamos frente a una de las mejores generaciones en la historia del Tricolor.

¿Rotación de técnico?

Sería una estupidez que los directivos en México destituyeran al colombiano Juan Carlos Osorio a estas instancias, faltando ya menos de un año para que arranque el Mundial de Rusia 2018 y estando a solo 4 puntos de conseguir su pase. Pero crean o no, si lo corren no sorprendería mucho.

Pese a las derrotas por goleada – que si dolieron – tales como el 7-0 ante Chile y el 4-1 frente a Alemania, Osorio tiene toda la confianza de la FMF y no lo van a correr para que estén “tranquilos” (o enojados), #OsorioNoSeVa.

Cabe destacar que por lo menos deja una enseñanza en esta clase de duelos, que hay que trabajar y mucho si se quiere potencializar en lo futbolístico. Dejar de experimentar en partidos oficiales, ya que es imposible que tras casi 3 años bajo el mando del Tri no se tenga un 11 base –  pero bueno, él es el técnico.

La disputa del tercer puesto pinta para ser otro duelo “experimental” de Osorio, en el cual no sirve de nada que meta a Vela si el mejor jugador debió haber estado ante Alemania peleando por la final, no por la “cola del podio”.

Toca el turno a la Copa Oro, donde “en su casa y ante su gente” y en su zona preferida (CONCACAF) México está más que obligadísimo a levantar el trofeo de campeón, ya sería el colmo que ante Honduras, Cuba, Estados Unidos o Costa Rica, no se ganara.

“Es mejor aprender ganando que perdiendo” pues ahora tocó perder, y si no se aprendió de un 7-0 menos de un 4-1. Haber como nos va en Rusia 2018.