Un intento frustrado de ataque terrorista se vivió en Bruselas, Bélgica cuando un hombre que intentaba detonar explosivos fue ubicado oportunamente por soldados.
Militares que patrullaban la Estación Central de Bruselas, clasificada desde hace tiempo por los servicios de seguridad como blanco potencial de terrorismo, tirotearon a un hombre alrededor de las 20:30 horas tras haber causado una pequeña explosión en el lugar. El estallido no provocó heridos y el agresor murió a consecuencia de los disparos.
El incidente se produjo en uno de los grandes nudos de transporte de la capital europea, con 60 mil pasajeros diarios, y provocó el desalojo fulminante de esa estación y de los aledaños de la Grand Place, el centro turístico de Bruselas.
De acuerdo con Eric Van Der Sypt, de la fiscalía belga, se trató de un fallido atentado terrorista.
Se señaló que el hombre no tenía ningún otro explosivo, aunque poco antes el diario La Libre Belgique informó que el individuo llevaba una mochila y un cinturón explosivo. El sujeto habría intentado activar los explosivos al grito de “Allah Akbar” ( Dios es grande, en árabe), pero fue ubicado oportunamente por los soldados.
Desde los ataques de París en noviembre de 2015, la estación se encuentra resguardada por vehículos blindados, militares con armas largas y elementos de seguridad con perros rastreadores de explosivos.
Bruselas fue blanco del terror en marzo de 2016, cuando una célula islamista materializó ataques coordinados en el aeropuerto internacional de Zaventem y el Metro de Maalbeek, con saldo de 32 muertos.