Redacción/ El Nacional
La leche materna cumple la función de aportar a los recién nacidos todas las necesidades nutricionales que demandan durante los primeros meses de vida. Las recomendaciones pediátricas actuales sugieren alimentar de esta forma durante los primeros seis meses de vida de bebé para optimizar su crecimiento, desarrollo y salud.
Según el estudio, la leucemia es el cáncer más común en la infancia y supone el 30% de todos los cánceres infantiles.
Efrat L. Amitay y Lital Keinan-Boker, autores del estudio, encontraron que la lactancia materna durante los primeros seis meses de la vida del niño o más tiempo se asocia con un 19% menos de riesgo de que los niños sufrieran leucemia, en comparación con alimentar al bebé sin la leche del pecho o la lactancia durante un período de tiempo más corto.
Asimismo, en un análisis de 15 estudios por separado los investigadores encontraron que dar el pecho a los niños disminuye un 11% el riesgo de sufrir leucemia infantil en comparación con no ser amamantados.