Redacción/El Nacional

El doctor José Pérez Alzaa de la Fundación Fecundart anunció el nacimiento del primer “bebé con genes perfectos”, en la ciudad de Córdoba, Argentina.

El recién nacido fue un varón y pesó 3,400 kilos mediante cesárea; aseguró que el método fue un TGS en el cual, a un embrión de cinco días le extrajeron cuatro células, en lo que va a corresponder la placenta y se estudió cromosómicamente.

“Se criopreservó y cuando supimos que era normal, se transfirió a un solo embrión”, precisó, el especialista.

 Con ello se tuvo un diagnostico de los embriones para saber cuál de esos es el que dará lugar a un embarazo y “cuál no se va a implantar, hará que el tratamiento fracasa y termine a lo sumo en un aborto”.

Pese al perfecto estado de salud del bebé, aclaró que no es “perfecto”, sino un bebé sano y aseguró que en el tratamiento no se hace “selección” de sexo, pues el único objetivo es que la pareja pueda concebir lo más rápido posible.

“Sabiendo que este embrión es normal cromosómicamente, podemos transferir uno solo con una muy buena tasa de embarazo”, aseguró.

Este tratamiento, que se realiza en gran parte de las clínicas argentinas desde 1999, cuesta entre 2,000 y 2,500 dólares, la mayoría de las prepagas lo cubren en gran proporción.