El dolor muscular es algo que cualquiera puede padecer pues es provocado por el cansancio, ejercicio intenso, tensión, gripe o una mala postura por ello, te presentamos algunos consejos que puedes seguir para tranquilizar los síntomas de ese dolor.
Masajes con aceites:Recibir un masaje en la zona afectada con el uso de aceites esenciales será muy efectivo para el dolor. Hace mezclas de aceite de almendras y aceite de canela, de jengibre o aceite de nuez moscada, son efectivas para aliviar tensiones musculares; sobre todo después de ejercicios intensos o posturas incómodas. Otra buena opción es masajear la zona afectada con pimienta molida y aceite de sésamo
Agua caliente: El contacto con temperaturas altas durante unos minutos liberará la tensión del músculo. Pero solo un poco, ya que el calor si aporta alivio pero también dilatar los vasos sanguíneos y aumentar el flujo circulatorio, lo que podría generar mayor hinchazón y dolor de la zona afectada.
Vinagre de manzana: Si tu dolor se debe a tensión o cansancio, necesitarás des entumir el músculo; prepara un baño de inmersión con agua tibia y vinagre de manzana.
Hielo:Si tu dolor es muy intenso aplicar hielo en el área te ayudará a desinflamar y relajar los músculos.
Ejercicios de elongación: Si tu cuerpo está muy tenso reactívalo con estiramientos o una caminata tranquila. Esto repondrá el estado de los músculos doloridos. Sin embargo, asegurarte antes de que no estás lesionada.
Dormí un poco: Trata de descansar; duerme de 7 a 8 horas durante la noche para que tu cuerpo se recupere.
Romero:Para la inflamación muscular, las hojas de romero pueden ayudar. El romero contiene propiedades antiinflamatorias que pueden aliviar los tejidos musculares y ayudar a disminuir el dolor. Prepara una mezcla de 30 gramos de romero en un frasco de agua hirviendo, cubre y deja reposar durante 30 minutos. Embebe un paño en la mezcla de agua y hojas de romero y aplica en la zona afectada 2 o 3 veces al día.
Pimienta molida: Un gran remedio casero para tratar el dolor muscular es la pimienta. Prepara una mezcla de pimienta molida y aceite de sésamo y masajea la zona muscular afectada.
Yoga: La práctica regular de yoga mejora la flexibilidad general de los músculos, haciéndolos menos propensos a los calambres y al dolor muscular. Una rutina regular sencilla (aunque sea en tu casa) ayudará a tu salud muscular.
Suplementos: La deficiencia de magnesio, vitamina E y calcio en el cuerpo puede causar dolor muscular. Puedes consumir regularmente suplementos para mantener la buena salud de tus músculos, además de asegurarte una dieta equilibrada.
Si sufres de calambres, puedes estar sufriendo un déficit de potasio. Consume 1 o 2 bananas diarias para evitarlo.