Fatiga, escalofríos, náuseas y vómitos son algunos de los síntomas que surgen con la “Bartonella henselae”, enfermedad causada por los arañazos o mordeduras de gato.
Un grupo de científicos estadounidenses reveló que abrazar y apretujar a los felinos conlleva un riesgo de infección pues la “Bartonella henselae” es una bacteria que portan los gatos y que puede dañar a los seres humanos.
Los expertos explicaron que el 40 por ciento de los gatos son portadores de esta bacteria por lo que hasta aspirar el pelo, tener contacto con la mucosa del animal y frotarse los ojos o llevarse las manos a la boca podrían causar la enfermedad.
El estudio detalló que cada año alrededor de 24.000 personas enferman con la fiebre por el arañazo de un gato en Estados Unidos. Aunque la mayoría de los casos desaparecen en unas pocas semanas, en otros casos es necesario tomar antibióticos, y si la infección se complica, órganos como los ojos, el corazón o el cerebro pueden verse seriamente afectados.
Por ello, los expertos recomiendan tener cuidado al tocar gatos callejeros y evitar que la mascota salga de casa.