Redacción/El Nacional
Un estudio realizado por el Centro Nacional de Información Biotecnológica de Canadá reveló que comerse los mocos de la nariz es de gran beneficio para la salud.
De acuerdo a la investigación, está práctica habitual entre los niños ayuda a la salud dental, pues el grosor y la humedad de la mucosidad fortalece los dientes, evita las caries y reduce el paso de bacterias dañinas al organismo.
Las secreciones nacionales contienen mucinas salivales que son eficaces contra las infecciones respiratorias y las úlceras estomacales además, el “hurgarse” la nariz también hace que las personas sean más felices.
“Ingerir restos de mucosidad seca es una forma ideal de reforzar el sistema inmunitario. Desde el punto de vista médico, es recomendable y es una actividad completamente natural. Para el sistema inmunitario, la nariz es un filtro en el que se acumula una gran cantidad de bacterias y cuando esta mezcla llega a los intestino, funciona igual que una medicina”, explicó el líder de la investigación, Friedrich Bischinger.
