Maestros, de al menos una docena de municipios indígenas y no indígenas, mostraron inconformidad al respecto del horario de verano que entró en vigor este domingo.
Algunas escuelas en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas no acataron el cambio de horario, y a las 8 de la mañana de este día no habían abierto las escuelas de educación básica.
También en escuelas de los municipios de San Fernando y Suchiapa, docentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) acordaron con padres de familia, mantener el horario de Dios y no adelantar una hora el reloj.
Consideraron que no hay una baja en el “consumo de energía, como argumenta el gobierno; y si un desequilibrio en el reloj biológico de miles de niños y niñas”.
Esta es la primera vez que municipios con una mayoría de población mestiza y urbana, se niega a acatar la disposición implementada en 1996 y sólo en zonas indígenas habían rechazado la medida.
En Chiapas más de 40 por ciento de la población que vive en regiones rurales e indígenas nunca han cambiado al horario de verano. Argumentan que “sólo hay un horario, ese es el horario de Dios”.
