Tras arrancarle de una mordida la cabeza a un canino, un hombre originario de Puerto Rico, fue condenado a pasar siete años en prisión.
De acuerdo con el informe policíaco, un sujeto identificado como Luis Arroyo, se encontraba con su pareja, quien decidió arrancarle la cabeza a un perro chihuahua, y posteriormente le dio un fuerte golpe a la joven que lo acompañaba, quien era dueña de la mascota.
Ante esto, Arroyo fue privado de su libertad por lo que deberá pasar siete años en una cárcel de Puerto Rico, además de pagar tres mil dólares, por los cargos de abuso doméstico y maltrato animal.
Pese que los hechos sucedieron el pasado sábado 4 febrero, en la ciudad occidental de Lares, a 90 kilómetros al oeste de San Juan, fue hasta ahora que un juez dictamino la sentencia, para el hombre de 40 años.
Esto luego que el detenido no pagara la fianza que una jueza le impuso, la cual consistía en saldar la cantidad 400 mil dólares, de acuerdo con el reporte oficial.
