Redacción / El Nacional

En un hecho bastante curioso, un aficionado ingreso al terreno de juego donde se llevaba a cabo el clásico de Honduras entre el Motagua y el Olimpia, anotando el gol del empate en dicho encuentro.

Cuando el Olimpia producía una jugada de peligro dentro del área, un joven aficionado entró  al terreno de juego en la misma zona del campo, y en el momento en el que el futbolista disparó hacia la portería, el aficionado introdujo el balón a las redes de manera simultánea.

Aunque no influyo directamente en la jugada, pues lo separaban algunos metros, los futbolistas del Motagua se fundieron en reclamos hacia el árbitro, quien decidió decretar como valida la anotación.

El partido concluyó  con un empate a dos goles por bando, pero lo que se llevó las miradas fue la participación del espontáneo en lo que será una jugada que se quedará grabada en las memorias del deporte.