Redacción/ El Nacional
Cualquier persona que robe un reloj Apple Whatch puede -en 20 segundos- reiniciarlo y hacerlo suyo.
La manera en que Apple diseñó su reloj inteligente hace que sea asombrosa mente fácil anular tu clave de acceso y limpiarlo por completo. Puedes configurar un código de acceso en el reloj, pero quien lo robe puede sencillamente mantener pulsado el botón “Power Off”, y a continuación seleccionar y borrar todos los datos en el dispositivo.
El iPhone, por el contrario, tiene ciertas características que lo hacen menos deseable para los delincuentes. Si lo configuras adecuadamente, el smartphone se puede borrar de forma remota, o puede requerir una contraseña para hacer cualquier cosa.
La policía reconoce que estas medidas desincentivan el robo. De hecho, San Francisco vio un descenso del 40% en los robos de iPhone en 2014 en comparación con el año anterior. El principal fiscal de la ciudad atribuyó esa caída a la tecnología “kill-switch” (el denominado interruptor de seguridad) que permite des-habilitar o desactivar los teléfonos robados.
Apple no incorporó un interruptor de seguridad en el Apple Watch. Una de las razones podría ser que el reloj de Apple no se conecta de forma independiente a las redes celulares o al WiFi, por lo que enviarle desde lejos una orden para que lo borre todo y se bloquee es una tarea difícil.
Sin embargo, no se entiende por qué es tan fácil que un extraño borre todos nuestros datos en el reloj de Apple sin ni siquiera una contraseña.
Apple no respondió de inmediato a las preguntas de CNNMoney.
Esta situación es inusual para una compañía que presume de su seguridad y privacidad. Apple se ha vuelto el mayor defensor de la privacidad del usuario ante las miradas indiscretas de los gobiernos. Y su función antirrobo, “Find my iPhone”, ayuda a que los compradores puedan saber si un teléfono ha sido robado.
