Redacción/El Nacional
Rubí Ibarra, la quinceañera más famosa de todo el mundo, celebró el día de ayer su cumpleaños -aunque los haya cumplido desde agosto- con una mega fiesta a donde asistieron más de veinte mil personas y cientos de medios de comunicación.
A través de una invitación en Facebook, donde el papá de Rubí, Crecensio Ibarra, realiza una extendida invitación “a quien guste ir”, fue como el evento masivo se convirtió en Trending Topic en redes sociales, haciendo para Rubí un mes lleno de invitaciones en programas televisivos, entrevistas en radio y regalos de diversos patrocinadores para su fiesta.
Sin embargo, no todo fue divertido en el festejo, pues desde primera hora del lunes se dejaron ver cientos de personas arribando a La Joya, donde Rubí habita, un pueblo muy pequeño que apenas Salió a la luz, y todo gracias a esta pequeña “confusión” -al principio el padre de Rubí había cancelado la invitación pública pero después volvió a invitar a cualquiera que quisiera ir-.
Rubí no se mostró contenta en ningún momento de su fiesta, solo se notó su cara de angustia y preocupación o desesperación al estar abarrotada de medios de comunicación, incluso, llegó a expresar su descontento al pedir a la prensa que “la dejaran en paz”.
El festejo continuó, las cosas se salieron de control y mientras se jugaban las carreras de caballos por ‘la chiva’, una persona murió mientras que otra más resultó herida.
Llegó la música a ambientar el lugar y aunque Rubí bailó un poco arriba del escenario después de haber presentado su vals, esto no fue suficiente.
Todo terminó cerca de las 04:00 horas de este martes, mientras iba amaneciendo se podía observar a gente tirada en el piso, tal vez dormida por cansancio o tirada por alcohol, otras familias en tiendas de campaña mientras otros, mitigaron el frío en sus coches.
Conforme pasaba el tiempo, la carretera -que fue invadida por cientos de coches- se fue desalojando permitiendo el paso normal de los automovilistas.
Mientras tanto, en el predio donde se realizó la fiesta, se podían notar las grandes cantidades de basura que dejaron los asistentes y que hasta el momento no se sabe qué pasará con ello o quien se hará cargo.
