La actriz Carrie Fisher, conocida por su papel como la “Princesa Leia” en la famosa saga fílmica de Star Wars, falleció este martes 27 de diciembre, a los 60 años, tras sufrir un paro cardíaco en un avión.
El pasado viernes, la estadounidense viajaba de Londres a Los Ángeles cuando tuvo el episodio, y al aterrizar, rápidamente Carrie recibió maniobras de resucitación, por lo que fue trasladada al centro médico de la Universidad de California en Los Ángeles.
Al llegar al centro médico, Fisher ya se encontraba en estado crítico, según informaron medios de Los Ángeles. Aunque durante la tarde se había reportado que estaba estable, su hermano, Todd Fisher, confirmó que la situación seguía siendo crítica.
Su muerte es lamentada por los fanáticos de una de las sagas fantásticas más populares del cine y por sus compañeros de elenco, quienes siguieron vinculados de una u otra forma al mito creado por el director George Lucas en 1977.
Parte de su historia:
Carrie, hija de del cantante Eddie Fisher y la actriz Debbie Reynolds, creció rodeada de la fama y fortuna de Hollywood. Cuando cumplía los dos años, su padre abandonó la familia para tener una relación con Elizabeth Taylor, quien era amiga cercana de su mamá.
A los 15 años se dio a conocer como actriz en un rol pequeño de la película Shampoo(1975) y luego saltó a la fama con Star Wars: Una nueva esperanza (1977), la primera entrega de la saga que la consolidó como un ícono cultural.
¿Qué hizo la “Princesa Leia”?
Su personaje, una princesa rebelde y empoderada, fue pieza central en las siguientes películas, El Imperio contraataca(1980) y El regreso del jedi(1983). Leia Organa, princesa en exilio de un planeta pacífico, lidera una rebelión contra un autoritario y asesino Imperio Galáctico, encabezado por la icónica figura de Darth Vader. En compañía de Luke Skywalker(Mark Hamill) y Han Solo(Harrison Ford), combate contra el Imperio y procura restaurar la paz en la galaxia.