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Agencias / El Nacional

Los abogados de un hombre condenado por trabajar con uno de los cárteles de tráfico de drogas más connotados dijeron el lunes que Estados Unidos no tenía jurisdicción en el caso porque no había intención de distribuir las drogas en el país o a través del mismo.

Rafael Humberto Celaya Valenzuela, quien es un miembro del violento cártel de Sinaloa, fue condenado en octubre por conspiración para distribuir en Estados Unidos más de 998 kilogramos de cocaína, además de metanfetamina y heroína.

Él iba a ser sentenciado el lunes en la corte federal de distrito de Nueva Hampshire, pero el juez pospuso la audiencia después de que sus abogados presentaron una moción que impugna la jurisdicción.

En el juicio, grabaciones secretas de audio y video mostraron que Valenzuela conspiró con compañeros del cártel y agentes encubiertos del FBI que se hicieron pasar por miembros de una banda criminal europea, para expandir el imperio de tráfico de cocaína de la organización a Estados Unidos y Europa.

Celaya enfrenta de 10 años de prisión a cadena perpetua; la fiscalía está solicitando más de 30 años.

Los abogados de Celaya, Jeffrey Feiler y Julie Connolly, dijeron hoy al juez principal del tribunal de distrito Joseph Laplante que la conspiración consistió en llevar cocaína a Europa, no a Estados Unidos, lo que significa que Estados Unidos no podía procesarlo.

Señalaron que los únicos participantes en la conspiración que mencionaron utilizar puertos de Estados Unidos o enviar embarques a destinos en Estados Unidos fueron los agentes encubiertos del FBI, quienes estaban tratando de atrapar al líder del cártel de Sinaloa: Joaquín Guzmán, conocido como “El Chapo”.

“El gobierno está tratando de tentar al Chapo”, dijo Feiler. Entonces, creó un vendedor de drogas europeo ficticio, creyendo “no podemos tentar al Chapo con otro comerciante estadounidense de drogas”.

Feiler y Connolly manifestaron constantemente que miembros del cártel consideraron pero rechazaron transportar las drogas hacia o a través de Estados Unidos.

En respuesta, un frustrado fiscal federal interino Donald Feith dijo que el rechazo de los conspiradores a utilizar puertos estadounidenses soló estuvo relacionado a un embarque y no descartó embarques futuros que pudieran venir al país o transitar a través del mismo.

Señaló que testimonios en el juicio mostraron que Celaya estuvo en una reunión realizada en agosto de 2010 en Miami en la cual los conspiradores hablaron sobre un embarque de aproximadamente 2 mil kilogramos de cocaína que provendría de Colombia y pasaría por Estados Unidos hacia Europa.

Feith dijo además que el jurado federal que condenó a Celaya consideró que las drogas iban hacia Estados Unidos. “Ese fue un tema durante todo el juicio”, subrayó Feith.

El juez Laplante dijo que el asunto de la jurisdicción debió ser planteado durante el juicio cuando pudo ser considerado en el contexto de toda la evidencia.

“No me inclino por conceder esta moción. No pienso que sea una moción meritoria”, señaló Laplante. El juez pospuso la audiencia de sentencia y no emitió una determinación respecto al reclamo sobre jurisdicción.

Solicitó que se revise el acta de juicio para ver qué evidencia presentada durante el mismo pudiera modelar su fallo. Guzmán escapó de una prisión en México en 2001 y operó su imperio desde una serie de escondites y casas de seguridad en esa nación, obteniendo miles de millones de dólares y moviendo toneladas de cocaína y otras drogas a Estados Unidos, dijeron los fiscales.

“El Chapo” fue recapturado en febrero de 2014.
AP