Redacción/El Nacional

Un hombre portador de VIH conocido como “la hiena”, fue condenado a dos años y 10 meses de prisión después de que reconociera que tuvo relaciones sexuales con más de cien mujeres -gran parte menores de edad- quienes desconocían su enfermedad, esto como un ritual de “purificación”.

Dicho ritual de “purificación”, consta en practicar sexo con las víctimas en cumplimiento de un tradición casi extinta en algunas zonas del sur del país, y que además, está prohibida por las leyes de Malaui.

Su detención fue dictada por orden del presidente de Malaui, Peter Mutharika, el pasado julio, después de que la cadena británica BBC publicara una entrevista con él.

Además de tener sexo con adolescentes tras su primera menstruación, a quienes se obligó a mantener relaciones con el acusado para marcar el paso de la niñez a la edad adulta, el hombre, confirmó que fue contratado por algunas comunidades para llevar a cabo la “purificación sexual” de viudas, que según esta tradición deben acostarse con un hombre antes de enterrar a su marido o tras tener un aborto.