Redacción/ El Nacional
El tratamiento del cáncer evolucionó en los últimos años, por lo que además de la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia, ahora se emplea la terapia en blanco y más recientemente la inmunología, destacó el oncólogo del Instituto Nacional de Cancerología (Incan), Eleazar Omar Macedo Pérez.
El nuevo tratamiento se aplica a pacientes con melanoma en México desde hace un año, el cual estimula el sistema inmunológico para que vuelva a reconocer a las células cancerosas y las elimine del organismo.
Según el especialista, la inmunoterapia actúa en las diferentes células del sistema inmune para detectar antígenos, los cuales son todo aquello que es diferente al cuerpo, es decir, un virus, una bacteria, un parásito o una célula cancerosa.
Una de las ventajas que ofrece la inmunoterapia es que los pacientes mantienen una respuesta sostenida contra el cáncer, a diferencia de los otros tratamientos en los que al cabo de un tiempo el cáncer se vuelve resistente.
La inmunoterapia produce en uno de cada cinco pacientes una respuesta sostenida, es decir, el paciente responde muy bien (al tratamiento) y de esos que responden hay una mitad que va a tener una respuesta sostenida, en donde el sistema inmunológico se reactivó de manera tan efectiva que mantiene sin crecimiento las células tumorales durante años a pesar de tener una enfermedad metastásica.
Es un logro que no se había alcanzado con ninguno de los tratamientos anteriores, pese a ello las quimioterapias, que ahora son menos tóxicas, la radioterapia y la terapia blanco siguen siendo parte del tratamiento contra el cáncer.
La terapia blanco “va atacar específicamente, no a toda la célula, sino a moléculas que tienen que ver con todas las formas que tiene la célula de perder el control”, como su capacidad de reproducción y de no morir.
La mayor ventaja de esta terapia es que aporta una máxima eficacia con una mínima toxicidad, ya que los medicamentos actúan sobre algunas moléculas que inciden sobre el desarrollo de la célula.