La modelo estadounidense, Kim Kardashian West, fue retenida el domingo a punta de pistola en su habitación de hotel en París por dos hombres enmascarados que vestían como policías, dijo una portavoz.
La representante mencionó que la estrella salió ilesa, sin embargo dijo que sí se encuentra “muy afectada”.
Kanye West estaba ofreciendo un concierto en Nueva York en ese momento. El artista canceló de imprevisto el espectáculo en el Meadows Festival tras decir a sus seguidores que debía detenerlo por una emergencia familiar.
Cabe mencionar que los hechos ocurrieron a las dos y media de la madrugada locales, 0:30 GMT, cuando un grupo de cinco hombres disfrazados de policías entraron en su residencia del selecto y céntrico octavo distrito de París armados y enmascarados, para despojar a Kardashian de sus joyas, mismas que tienen un valor estimado a once millones de dólares, según el reporte de hoy por medios locales.
Kardashian West se encontraba en París para asistir a la semana de la moda en la capital francesa. El domingo por la noche asistió al desfile de Givenchy.
Tal parece que a Kim no le ha ido muy bien en los últimos días, pues también fue asaltada la semana pasada por un acosador de celebridades que intentó agredirla cuando entraba en un restaurante.