Al sudeste de Turquía se llevaron a cabo de manera simultánea dos atentados, presuntamente perpretados por los rebeldes kurdos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), de acuerdo a fuentes de seguridad locales.
El primer ataque fue un coche bomba ubicado al centro de la ciudad de Diyarbakir, en el cual fallecieron 4 civiles y un agente policíaco, dejando una docena de heridos. En el segundo acto también se origino por una explosión, pero esta vez fue en a localidad de Kiziltepe, cobrando las vidas de tres 3 civiles y una elemento de seguridad, así como al menos 50 personas heridas ya que se encontraba cerca del Hospital Estatal de Mardin.
Algunas horas antes, en un movimiento de actividad militar en la zona de la provincia de Sirnak, cinco soldados del ejercito turco murieron tras un ataque también atribuido al grupo rebelde de PKK.
EL PKKestá clasificado como ungrupo terroristapara los gobiernos de Turquía, la Unión Europea y Estados Unidos.