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Agencia/El Nacional
A poco más de un meses de los hechos Ocurridos en Orlando, Florida en donde perdieron la vida 51 personas al interior del bar “Pulse” un nuevo hecho violento dejó como saldo hasta el momento dos personas muertas y 17 heridos.
Hasta 17 personas habrían sufrido balazos en el incidente que se produjo de madrugada en el Club Blu, en Fort Myers, Florida, según indicó el capitán Jim Mulligan, de la policía de dicha localidad.
Son Stefan Strawder, una estrella del baloncesto juvenil de la zona, de 18 años, y un chico de 14 años identificado como Sean Archilles, los que perdieron la vida en este hecho, según fuentes locales.
Médicos de Florida comentaron que una de las víctimas del tiroteo murió en la discoteca y otra en el hospital Lee Memorial, donde en total ingresaron 16 personas heridas por arma de fuego, de las cuales la mayoría ha recibido ya el alta médica.
Cherly Garn, del sistema de salud del condado de Lee, al que pertenece Fort Myers, dijo a medios locales que todavía siguen ingresadas tres de las personas heridas en el tiroteo. Dos de ellas están en cuidados intensivos, una en estado crítico y otra grave.
El más joven de los heridos llegados al Lee Memorial tiene 12 años y el más mayor, 27.
Por ahora se desconoce cómo y por qué se produjo el tiroteo y si los disparos fueron hechos por una o varias personas, aunque hay tres sospechosos que están siendo interrogados.

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Las armas utilizadas han sido recuperadas, según la policía de Fort Myers, una ciudad de unos 69.000 habitantes situada a 257 kilómetros de Miami.
Los hechos se desataron después de la medianoche, cuando uno o más tiradores mataron a por lo menos dos personas e hirieron a otras 16 en un boliche llamado Club Blu, ubicado en la ciudad de Fort Myers, donde se celebraba la fiesta para adolescentes “Swimsuit Glow Party”, en la que había menores de edad.
Según explicó el boliche en su página de Facebook, el tiroteo comenzó cuando los padres de los chicos comenzaban a retirarlos del club.
“Estamos profundamente dolidos por todas las personas afectadas. Tratamos de darles a los chicos un lugar que creíamos era seguro para pasar un buen rato. Edades entre 12 y 17. Había seguridad armada y seguridad total dentro y fuera del local. Cuando el club comenzó a cerrar y los padres llegaron a buscar sus hijos… comenzó todo. No pudimos hacer nada más, como ven no fueron los chicos en la fiesta los que cometieron este acto despreciable. Nuestras condolencias a todas las partes afectadas”, escribió la gente de Club Blu en Facebook.

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Medios locales citaron a testigos de los hechos en Fort Myers que dijeron haber escuchado hasta 30 disparos y otras que aseguran que los tiros se produjeron cuando los asistentes a la fiesta salían del Club Blu, en medio de lo que uno describió como un “loquero”.
“Era un manicomio con gente que buscaba a sus amigos para saber si estaban bien y hubo muchas llamadas de padres a sus hijos”, escribió un joven en su cuenta de Facebook, según informa WINK News sin identificar al autor de ese mensaje.
Sin embargo, los testigos que han escrito en las redes sociales no han aportado datos significativos sobre el autor o autores. Y muchos apuntan  a acto entre pandillas.
El capitán de la policía de Fort Myers Jim Mulligan dijo que el tiroteo no fue un acto terrorista.