Valeria Gonzalez / El Nacional
Seguro que la primera alternativa que te viene a la mente es venderlo. Ese es quizá el mejor uso, al menos el más lucrativo, que le podrías dar a tu teléfono inteligente que acabas de cambiar por otro más moderno y probablemente más grande.
Aunque también lo podrías donar a alguien que lo necesite más que tú, como algún familiar o amigo.
O entregarlo en un centro de reciclaje.
Pero si le tienes demasiado apego y no estás dispuesto
E-book
No será un Kindle, el lector de libros electrónicos de Amazon, pero tu Smartphone viejo puede asumir las funciones básicas de un e-book.
No tendrás más que descargar una aplicación específica para ello.
Existen varias, como Moon+, Aldiko, Cool Reader, o la propia app de Kindle, disponible para plataformas iOS, Android o Windows Phone.
Éstas te permitirán convertir tu viejo dispositivo en un e-reader, algo muy útil para los viajes, por ejemplo.
Así evitarás gastar la batería de tu nuevo smartphone.
Cámara de vigilancia
Puede que no estés dispuesto a comprar una cámara de seguridad para la casa, por considerarlo un gasto prescindible.
Pero ahora que decidiste adquirir un teléfono inteligente nuevo, podrías utilizar el viejo con ese fin.
En este caso también tendrás que descargar una aplicación. Encontrarás varias gratuitas disponibles: Security Cam, Videoüberwachung IP-Kamera o vMEye, entre otras.
También será importante que coloques el smartphone viejo cerca de un enchufe, sobre todo si quieres que grabe durante un periodo largo, como, por ejemplo, las vacaciones.
Reproductor multimedia
Un teléfono inteligente puede servir perfectamente como disco duro externo, para almacenar datos.
Asimismo, con el cable adecuado para conectarlo al televisor (dependerá de qué tipo de puerto tenga el aparato, USB o HDMI), también podrás reproducir todo ese contenido en la pantalla.
Y esto no solo sirve para los smartphones con gran capacidad.
Siempre podrás reproducir el contenido en streaming, directamente de las páginas en las que está alojado, sin tener que descargarlo en tu celular. En ese caso actuará de simple transmisor de datos.
Computadora
Tu teléfono es casi una computadora. No la deseches.
Sí, tu smartphone puede ser una computadora, aunque de gama media.
Como para el resto de funciones, para esto tampoco necesitarás la tarjeta SIM. Sin ella, pero con una conexión inalámbrica, podrás navegar por internet, acceder a redes sociales, y crear documentos de texto, además de jugar, escuchar música, etcétera.
Y para que conviertas el teléfono inteligente en una computadora en toda regla, sólo tendrás que conseguirle una pantalla más grande y un teclado.
Lo primero es sencillo, ya que a día de hoy existen adaptadores para conectar el móvil a casi cualquier tipo de monitor externo.
Y para lo segundo deberás comprar un teclado inalámbrico y activar el bluetooth del teléfono.
Así, sin demasiado esfuerzo y en la mayoría de los casos sin gasto, tendrás un nuevo aparato en casa.